Un taxista apareció muerto en las horas de la medianoche del pasado jueves 9 de julio de este año 2020 en una calle empinada de la localidad Rafael Uribe Uribe en el sur de la capital del país.
El coronel Pedro Fernando Bonilla Pérez, oficial de inspección y vigilancia de la Policía Metropolitana de Bogotá (Mebog) dijo en Radio Reloj que al profesional del volante le propinaron un certero balazo por la espalda que acabó con su existencia en cuestión de segundos cuando transitaba por los lados del barrio San Jorge.
En un comienzo se pensó que el ‘canario’ de 39 años de edad había sufrido un accidente de tránsito tras un presunto micro sueño o daño en el corazón, pero al llegar colegas del conductor en compañía de agentes del orden y paramédicos del servicio distrital de salud, se dieron cuenta que el parroquiano estaba baleado.
Se pudo establecer que una señora que iba dentro del automotor de servicio público sería pieza clave para esclarecer este crimen que enluta a una familia y al gremio.
El vehículo marca Kia de placas WMM 572 chocó contra un andén y un poste del alumbrado público y quedó atravesado sobre la calle con afectaciones en la parte delantera de la nave.
El coronel Bonilla Pérez manifestó en el Radioperiódico Las Noticias que el taxista, de quien no se suministró su identidad, tenía todas las pertenencias y por eso se descarta que se trate de un atraco.
Unidades de criminalística del Cuerpo Técnico de Investigación CTI de la Fiscalía General de la Nación se hicieron presentes en el sitio para adelantar las labores de inspección y traslado de los despojos mortales hacia las instalaciones del instituto de Medicina Legal.